La autopista
Conducía una gran moto con toda naturalidad (nunca he cogido algo mas grande que un ciclomotor). Mi madre conducia un coche (nunca ha cogido un vehiculo) y estaba a mi izquierda. Era una autopista pero ibamos hablando y nos oíamos claramente.LLegó un desvío, mi madre tomo el camino de la izquierda y yo seguí de frente mientras intentaba entender lo ultimo que me estaba diciendo. La miré para indicar con un gesto que no podía oirla, al volver la cabeza hacia mi carril vi como una enorme furgoneta negra que iba en dirección contraria se abalanzaba contra mi.
No pude hacer nada, solo sentir aquel impacto. Nunca había sentido la velocidad y el dolor en un sueño de la manera en que lo hice en éste. Un golpe, un dolor intenso pero corto y oscuridad.
De nuevo todo se iluminó, yo había cambiado. No pesaba, me miré y mi cuerpo era borroso, hetereo, rodeado de un aura que bailaba entre intensos tonos azules y verdes. Miré alrededor y ví mi cuerpo físico destrozado, el conductor de la furgoneta casí tenía medio cuerpo fuera de la cabina y estaba inconsciente. Mi madre lloraba junto a mí.
Los cristales del vehículo rodaban toda la escena, los miré fijamente quedandome hipnotizado por su brillo mientras me daba cuenta que se estaban acercando a mi, su estado cambiaba a algo líquido y uno a uno se iban acercando a mí para unirse a ese aura que me rodeaba y desaparecer.
Yo lo veía todo con una frialdad pasmosa. Había otro yo, ese que a veces ve los sueños como espectador y no como parte activa que no podía creer que me comportase de aquella manera. En cualquier caso me dí cuenta que ese ya no era mi lugar y que tenía que irme. "Es el momento de ir abajo" me dije, lo dije con mucha certeza y la verdad es que no sabía muy bien que lugar era ese "abajo".
Dí la espalda a esa escena y me fui.
3 comentarios
pricher -
Skadhy -
Deberias hacer un copyright de tu blogo, ya que como sigas dando an buenas ideas, se van a forrar a tu costa!
un keso!
whicho -