Blogia
CarENciA

14/03/2004 Dia de elecciones

Entraba a las 10 a trabajar o eso creía.

Me costó bastante levantarme porque me acosté como a las 5 (estoy mayor), todo para ver que cuando llego al trabajo me han cambiado el turno por arte de magia y me dicen que realmente entraba a las 14, cojonudo, según mi coordinador un compañero había solicitado un cambio conmigo. Algo imposible porque mi compañero tenía el mismo horario que yo en ese mismo día, a ver para que quería el cambio... En fín que me tuve que ir, con un cabreo muy simpático.

Así que me llamé a mi madre y me fui a votar, primero a mi zona y luego con ella en el barrio. Llamé a Raúl y le ví un rato mientras el bajaba a votar, le conté lo de la mani y estaba flipando. También me encontré con su madre y su hermano y estuvimos hablando del tema, mi madre nos contó que había pasado mucho miedo estos días porque le recordaba a cuando era pequeña y tenía que salir corriendo por los bombardeos de la guerra civil, no quería que nosotros tuvieramos que sufrir lo que ella sufrió siendo una niña, pobrecita joder.

Estuve comiendo con ella y hablando mucho del tema, era una vergüenza lo que estaban haciendo con la gente, como la estaban tratando y mi madre tenía miedo de que estos volvieran a gobernar porque ya podrían hacer mucho mas y mejor lo que les vinieran en gana. En general el barrio estaba muy cabreado, incluso los colegas de toda la vida que tanto han cambiado y que antes habían votado al PP o bien ni siquiera lo habían hecho, se sentían muy engañados.

Y de allí al curro.

Por internet estuvimos todo el día mirando en internet como iban las recaudaciones de votos, pero hasta las 20.00 no empezamos a ver resultados. Tres sondeos indicaban ganador a uno y otros tres a otro, tampoco informaban mucho.

El final de la historia ya la sabemos todos. Tengo bastante confianza en como han salido las cosas, esperemos que así sea y que no se vuelva a corromper nadie, porque ya nos conocemos.

1 comentario

jana -

hum...ya sólo te quedan 10 días para ponerte al día (valga la redundancia), cuando llegue ese momento empezaré a bombardearte con mis absurdos comentarios (es broma).
Besos